La entrada en producción de nueva superficie de olivar incrementa en más de 13.000 toneladas la producción media de aceite de oliva en Extremadura en los últimos años
Esta notable diferencia, de algo más de 13.200 toneladas, tiene como causa en la entrada en producción de nueva superficie dedicada al olivar. Este es un sector estratégico en Extremadura, que ha tenido además un importante crecimiento, con fuertes inversiones, tanto en el campo, apostando por el cultivo superintesivo e intensivo en regadío, como en almazaras, que han aumentado su capacidad de transformación y producción.
Con datos referentes a la evolución de las diez últimas campañas de aceite, desde la de 2011/12 hasta la actualidad, la producción en Extremadura se situó durante seis campañas por encima de las 50.000 toneladas. En las otras cuatro campañas restantes se superó esa cifra.
Esos mismos datos reflejan que la campaña 2012/13 fue la más baja de las diez últimas, con una producción que apenas superó las 24.100 toneladas, frente a la de mayor producción, que fue la campaña 2018/19 en la que se batieron records con una producción de más de 73.600 toneladas. Esta misma tendencia siguen las cooperativas asociadas a Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, para las que estas mismas campañas fueron las de menor y mayor producción de las últimas registradas, con más de 13.500 toneladas y casi 40.500 toneladas de producción respectivamente.
Y es que precisamente en esa campaña 2018/19 Extremadura encadenó las dos mayores cosechas de aceite de oliva de su historia, ya que la producción en la campaña anterior fue de 73.282 toneladas. Cifras ambas que están muy por encima de la media de las diez últimas campañas en la región a la que anteriormente se hacía referencia.
Con todo ello, Extremadura es la tercera región productora de aceite de oliva y junto a Andalucía y Castilla-La Mancha suman el 93% de la producción media anual española de aceite de oliva durante la última década. Estos datos cobran especial relevancia si se tiene en cuenta que España se sitúa en el primer lugar mundial en superficie y producción de aceite de oliva, según los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que reflejan también que la producción española representa aproximadamente el 60% de la producción de la UE y el 45% de la mundial.
El sector del aceite de oliva ha tenido un crecimiento extraordinario en Extremadura y Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura considera que esta tendencia va continuar aunque ralentizada por los bajos precios, que están llevando a los agricultores a apostar por otros cultivos, como está sucediendo últimamente con la almendra.
En ese crecimiento se está notando también, cada año más, una tendencia de las campañas a ser más cortas en producción ya que la producción se viene concentrando en los primeros meses de la campaña. Si bien diciembre y enero son los meses que representan habitualmente el grueso de la producción, cada vez toma más protagonismo el de noviembre, apostando así también por aceites más tempranos.
En ese mes de noviembre del año pasado las cooperativas ya habían producido el 53% del aceite que había. Y es algo que va en aumento, porque esa cifra estaba en torno al 45% en ese mismo mes de las dos campañas anteriores. Esto se debe a la apuesta por aceites de oliva más tempranos, con la misma calidad insuperable que tienen los aceites extremeños.
Esta estrategia de apostar por una recolección en fechas más tempranas está calando en el olivar extremeño. No solo en el superintensivo, sino también en el tradicional en busca de mejores precios en el mercado. Porque el tema de los bajos precios, con producciones crecientes a nivel español y mundial, y un consumo que no crece tanto, es un problema coyuntural que puede convertirse en estructural. Por eso el sector tiene que tomar medidas para resolverlo, fundamentalmente orientadas a incrementar el consumo, y ahí las cooperativas oleícolas extremeñas estamos dando importantes pasos, tanto en comercialización como en investigación e innovación.
