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Cooperativas Extremadura estima una cosecha de cereales de 1.018.499 toneladas
Según la primera previsión, todos los cultivos cerealistas bajan su producción esta campaña excepto trigo duro y avena
Los datos de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura reflejan que en la región se cultivará una superficie de 240.688 hectáreas dedicadas a cereales, con una previsión de descenso en la producción de todos los cereales excepto trigo duro y avena, que aumentan significativamente.
Así, la producción de maíz en Extremadura se estima en 528.000 toneladas, lo que sitúa a la región como la tercera comunidad autónoma con mayor producción en esta campaña, por detrás de Castilla y León y Aragón. Aun así, esta producción representa un descenso del 2% respecto al año anterior.
La superficie destinada al cultivo de maíz en Extremadura durante esta campaña asciende a 44.000 hectáreas, según estas mismas primeras estimaciones, con un rendimiento estimado de 12 toneladas por hectárea.
Respecto a los cereales de invierno, destaca principalmente el aumento de la producción de trigo duro, que se estima en más de 25.620 toneladas, y de avena, que se espera que ronde las 110.200 toneladas. La producción de estos cereales aumentará así un 31,3% en el caso del trigo duro y un 11,3% en el de la avena, situando a Extremadura como tercera productora nacional en ambos cultivos.
Junto a ello, las estimaciones apuntan a una producción de 156.766 toneladas de trigo blando, 9157.713 toneladas de cebada, 200 toneladas de centeno y 40.000 toneladas de triticale.
Con todo ello, la producción total de cereales en Extremadura ascenderá a 1.018.499 toneladas, destinando a los distintos cultivos más de 240.000 hectáreas. Esta cifra supone el 6,7% de la producción total nacional.
Es destacable también, de los datos nacionales, un ligero incremento en esta campaña de la superficie de cereal de invierno, en un 0,35% hasta alcanzar las más de 5,6 millones de hectáreas, lo que ha supuesto además un incremento del rendimiento medio de los cereales del 55,9%, pasando de 2,054 toneladas por hectárea en 2012 a 3,20 toneladas por hectárea en 2013.
De los datos nacionales se desprende el comportamiento poco homogéneo de los cereales en las diferentes provincias y comunidades autónomas cerealistas, con rendimientos desiguales, según constató el consejo sectorial de Cereales de Cooperativas Agro-alimentarias de España, reunido ayer.
Las causas del descenso rendimiento se deben a la falta de agua durante todo el ciclo de cereal y a las elevadas temperaturas que desde la mitad de marzo se han producido en casi toda España. A ello hay que sumar que a finales de abril se produjo una fuerte caída de temperatura, llegando a helar el cereal en una parte importante de la principal zona cerealista, Castilla y León, lo que ha provocado mucho más daño en los cereales, que si éstos hubieran tenido un año agronómico más húmedo.
La comunidad autónoma más castigada por la sequía ha sido Castilla y León, que con 3,29 Mt, sigue siendo la mayor productora, pero pierde un 62,75 % respecto a 2016 y un 54,3 % de cereal sobre la media de las anteriores tres campañas.
Todos los datos de la primera estimación de la campaña de cereales a nivel nacional, aquí.